Ítalo Calvino (1923-1985) fue uno de los escritores italianos más importantes del siglo XX. Invitado por la Universidad de Harvard, en 1984, programó un ciclo de seis conferencias, de las cuales sólo llegó a escribir cinco, porque lo sorprendió la muerte el 19 de septiembre de 1985.
Estas propuestas, que se publicaron después de su muerte en el libro: Seis propuestas para el próximo milenio, contienen los seis rasgos que, en su opinión, debería poseer la literatura del siglo XXI. De este modo poseemos las claves para entender la concepción de la literatura y el mundo por parte de un autor único como fue Ítalo Calvino.
Éstas son las cinco propuestas que dejó escritas:
1. Levedad o lightness: según Calvino un texto leve es aquel que se desliza fácilmente, en función del peso del lenguaje, en función de la metáfora y de las relaciones entre fantasía y realidad.
2. Rapidez o quickness; allí Calvino explica que existe un vínculo verbal que crea cadenas de acontecimientos. Los simbolismos de los objetos dentro de la narración se vuelven mágicos imanes y la economía del lenguaje es esencial para que el relato no se convierta en una sucesión de palabras sin significado; además de que la narración debe tener un ritmo propio para mantener la atención del lector. Ser rápido, no obstante, no significa precipitarse, sino ser preciso. Festina lente, apresúrate despacio, es el lema de Calvino.
3. Exactitud o accuracy esto quiere decir que el escritor debe que tener bien definido de qué quiere hablar en un texto y también será necesaria la capacidad de evocar imágenes nítidas y memorables a través de un lenguaje preciso como expresión de los matices del pensamiento y de la imaginación. En literatura, pese a la creencia popular, el concepto de exactitud no es distinto al de la ciencia. La búsqueda de le mot juste no es sólo un sibaritismo estilístico, es la piedra de toque de todo el edificio literario. Hay una imagen esperando despertar en la imaginación de cualquiera de nosotros y el cometido del escritor es hallar la clave correcta, el orden preciso, las combinatorias adecuadas y la extensión idónea para que lenguaje e idea se fundan en una sola cosa.
4. Visibilidad: que el escritor pueda imaginarse visualmente todo aquello que su personaje ve o cree ver, así como el contenido visual de las metáforas que utilice. Para Calvino, la imagen es la comunicación con el alma del mundo, como lo plantea ya Platón desde el Mito de la caverna. Pero se plantea al mismo tiempo el lugar común de las imágenes en el siglo próximo y propone reciclar las imágenes sobre un nuevo contexto que les cambie el significado o hacer un vacío para volver a empezar desde cero. Y explica que el “post-modernismo puede considerarse la tendencia a hacer un uso irónico de lo imaginario de los mass media, o bien la tendencia a utilizar el gusto por lo maravilloso heredado de la tradición literaria en mecanismos narrativos que acentúen su extrañamiento.”
5. Multiplicidad: en la que Calvino se refiere al tejido de diversos saberes científicos y los diversos códigos en una visión plural y facetada del mundo. Porque el mundo de hoy tiene tantas lecturas como nunca antes. Y se pregunta: “¿qué somos, qué es cada uno de nosotros sino una combinatoria de experiencias, de informaciones, de lecturas, de imaginaciones? Cada vida es una enciclopedia, una biblioteca, un muestrario de estilos donde todo se puede mezclar continuamente y reordenar de todas las formas posibles.”(Calvino, 1997)
6- Consistencia. Así se habría llamado la sexta propuesta, tal y como garabateó en su borrador. Queda a nuestro análisis intentar desentrañar lo que nos quiso transmitir.
Fuentes: Taller de factores humanos, Talleres UACM
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